Sacrificio

Grupo SADA se adelantó a las demandas de un mercado cada vez más exigente y en 1994 fue una de las primeras compañías europeas en implantar un sistema de aseguramiento de la calidad en todas sus plantas de procesamiento y actualmente todas ellas están certificadas bajo la Norma Mundial de Seguridad Alimentaria publicada por la BRC (British Retail Consortium), siendo SGS la entidad certificadora de tal norma.

Nuestras plantas de procesamiento están provistas de la más alta tecnología, empleando sistemas de sacrifico que permiten compaginar la ausencia de sufrimiento de los animales con la excelencia en la calidad de la materia prima.

Nuestras modernas instalaciones de procesado y despiece de canales de pollo están dotadas de potentes equipos refrigeradores que permiten mantener nuestro producto a una temperatura de conservación adecuada y favorable, siendo la base para asegurar el perfecto estado de nuestros productos en el momento de su distribución. Estrictos programas de higiene, limpieza y desinfección nos permiten asegurar y garantizar una prolongada vida útil, como demuestran nuestros controles microbiológicos semanales.