CUK 50: Invierno 2014. Explotación de gallos y gallinas reproductores pesados

Explotación de gallos y gallinas reproductores pesadosLas granjas de ambiente controlado, donde se gestionan elementos como la temperatura, la humedad relativa, la velocidad de entrada de aire, la luz, el consumo de agua o la ingesta de pienso, garantizan en todo momento que las aves reciben el máximo de confort, con el fin de mejorar todas las características relacionadas con su desempeño como reproductores.   David Jiménez Zarza, Sada p.a. Producciones Ganaderas S.A.   Desde que a principios del siglo XX al este de Estados Unidos se contemplara la posibilidad de criar pollos de manera intensiva para producir lo que llamaban broilers, que era un pollo abierto longitudinalmente y asado a la brasa, hasta nuestros días, este sector ha experimentado y experimenta continuamente grandes cambios siempre enfocados a la producción de carne de pollo. En concreto, el sector avícola en España se ha desarrollado rápidamente en los últimos sesenta años y pertenece a uno de los mercados más especializados e innovadores del mundo en cuanto a producción animal. Actualmente, se caracteriza por el uso y continua búsqueda de soluciones sostenibles y el bienestar animal; y constituye una importante parte del sector agroalimentario. Se trabaja con una mentalidad basada en la tradición y, al mismo tiempo, aplica las más innovadoras soluciones para mantenerse a la cabeza en cuanto a producción y sostenibilidad; todo ello con el fin de satisfacer la creciente demanda de productos con un valor altamente nutritivo y cumplir cuestiones de seguridad alimentaria, disponibilidad y asequibilidad. Por otro lado, los consumidores demandan cada vez más aves criadas de forma profesional y que garanticen todos los estándares de bienestar animal, calidad y seguridad alimentaria. No en vano, la carne de pollo es un elemento indispensable en la cesta de la compra, pues es la más consumida en nuestro país (34%, seguida del cerdo con un 27%). Por lo tanto, esto lo convierte en una gran actividad económica con un elevado número de personas y empresas que trabajan en este sector. De ahí que uno de los principales objetivos que perseguimos continuamente sea aumentar el valor añadido de nuestros productos, produciendo mejor, de forma sostenible, usando cada vez menos materias primas y ahorrando en consumo de agua y energía. PRODUCCIÓN DE HUEVOS FÉRTILES Explotación de gallos y gallinas reproductores pesadosDicho esto, el objetivo de este reportaje es tratar de contar lo que acontece en una explotación dedicada a la producción de huevos fértiles, de los cuales se obtendrán los pollitos que, una vez cebados, son los llamados broilers. Podríamos nombrar las diferentes fases de producción como: 1. Recría, donde se reciben con un día de vida los que serán las gallinas y gallos dedicados a la reproducción. En esta fase se crían por separado hasta alcanzar la madurez sexual. 2. Reproducción (la que nos va a ocupar), donde se juntan los gallos y las gallinas para su convivencia y de donde saldrán huevos fértiles para la obtención de pollitos. 3. Incubación, donde incubamos y obtenemos los pollitos de un día de vida. 4. Cebo, se reciben los pollitos y se crían. Las características que hay que tener en cuenta cuando hablamos de reproducción son: el peso y la madurez sexual, el índice de crecimiento, el número de huevos, el tamaño del huevo, la eficiencia alimenticia, la incubabilidad de los huevos fértiles, la fertilidad, el rendimiento de la canal y de la conformación del cuerpo, la libido, la viabilidad, la integridad esquelética, el plumaje (cubierta, tasa y color), la agresividad y la adaptación al estrés por calor. Todas estas características han ido evolucionando y mejorándose en el tiempo; y así seguirá siendo, pues este es un proceso en continuo desarrollo que no deja de experimentar cambios y mejoras. Lo que hoy es más novedoso puede dejar de serlo en poco tiempo. UN EJEMPLO DE INNOVACIÓN Explotación de gallos y gallinas reproductores pesadosLa explotación ubicada en Roda de Andalucía (Sevilla), con 7.500 metros cuadrados y cinco naves de reproducción, es un ejemplo de innovación donde se aplican tecnología, manejo y tradición. Las aves se encuentran alojadas en naves de ambiente controlado, que mediante un procesador al cual se le introducen los estándares de crecimiento y producción, gestiona elementos tales como la temperatura, la humedad relativa ambiental, la velocidad de entrada de aire, la luz, el consumo de agua y la ingesta de pienso, entre otros. Esta forma de trabajar garantiza en todo momento que las aves reciben el máximo de confort que se les puede ofrecer, con el fin de mejorar todas las características relacionadas con su desempeño como reproductores. De esta manera, se consiguen ahorros de materias primas, energía y agua, así como un descenso de las emisiones de CO2, aparte del considerable aumento de la producción, contribuyendo de esta manera a su sostenibilidad. Las aves comen a primera hora de la mañana, y una vez finalizado el pienso, las líneas de comederos se elevan para evitar ocupar espacios y mejorar el tránsito y la convivencia de animales por la nave. Esta debe de estar equipada con sistemas de calefacción para controlar las bajas temperaturas del invierno y de refrigeración para el verano. El rango de temperatura por el que nos vamos a mover está comprendido entre los 19 y los 21 grados. Con los sistemas de renovación de aire el ambiente dentro de la nave es perfecto en todo momento, se garantiza el aire limpio, independientemente de la temperatura y humedad del aire exterior, y se evita la producción de gases nocivos como el amoniaco y el CO2. GESTIÓN DE LAS AVES Salud, higiene y buen manejo de la granja, así como la cría, es esencial para el mejor desempeño de la explotación. Las aves reproductoras pesadas se logran cruzando líneas de machos de crecimiento rápido, buena eficiencia en la conversión alimenticia y alto rendimiento en la producción de carne, con líneas de hembras que son seleccionadas para las mismas características de engorde y para producir grandes cantidades de huevos. Producir y mantener los machos y las hembras de calidad es esencial para garantizar el máximo nivel de fertilidad. Y también es importante mantener una buena condición corporal mediante un correcto y buen control de la alimentación. Un macho activo tendrá una posición del cuerpo vertical, está alerta, y muestra un buen color en sus crestas y picos, además no debe de tener un exceso de carne. Por otro lado, hay que recordar que la gallina lleva la mitad de los genes responsables del rendimiento de los pollos de engorde. Esto significa que las hembras tienen gran tendencia al sobrepeso, lo cual puede dar lugar a problemas con la persistencia de la puesta y la fertilidad. Por lo tanto, hay que ser particularmente cuidadoso en la alimentación de las aves en todo momento. La clave para controlar el peso de los animales es teniendo una comprensión individual del total del lote para poder hacer un correcto uso de la alimentación. Se controlan los pesos corporales de los animales semanalmente, así como los cambios en su composición corporal, niveles de producción de huevos y peso del huevo, lo cual determina la ración de pienso en todo momento. Dada la facilidad al engorde de estos animales, el pienso se controla diariamente para evitar problemas de sobrepeso que conllevaría un desastre total del lote. Asimismo, los animales dejarían de comportarse como reproductores y las pérdidas productivas podrían llegar a tener graves problemas fisiológicos que en algunos casos podrían llevarles hasta la muerte. Los comederos destinados a las hembras difieren al de los machos para, de este modo, lograr que ambos no compitan por el pienso, el cual es específico para cada uno de ellos, ya que difieren en sus necesidades de mantenimiento, crecimiento y producción, en el caso de la gallina, y de actividad, en el de los machos. En el de las hembras se dota de rejillas que evitan que el macho pueda introducir la cabeza (que es de mayor tamaño que la de la hembra); y en el del macho, se trata de comederos de plato que basta con elevarlos lo suficiente como para que la gallina no llegue, ya que el macho es más alto y come sin problema. MANEJO DEL HUEVO Explotación de gallos y gallinas reproductores pesadosUnas buenas prácticas de recolección, clasificación, higiene y almacenamiento del huevo son fundamentales para maximizar la calidad de la incubabilidad y del pollito, que sólo pueden lograrse cuando el huevo se maneja en condiciones óptimas entre la puesta y la incubación. Hay que recordar que un huevo fértil desde el momento de su eclosión contiene muchas células vivas. Los ponederos deben mantenerse libres de excrementos, desechos y huevos rotos. Los huevos son recogidos al menos cuatro veces al día. Los nidales o ponederos se cierran automáticamente al atardecer para así evitar que la gallina duerma dentro y pueda dejar sus excrementos. Al comienzo del día siguiente se vuelven a abrir para la recepción de los animales. Al clasificar los huevos para incubar hay que centrarse en la idea de lo que queremos obtener, que no es más que pollitos sanos. Por ello hay que descartar los huevos sucios, rotos, de doble yema, excesivamente gordos, porosos, deformes, etc., que no sirven para ser incubados. El resto se mantienen en todo momento a temperatura próxima a los 20 grados con una humedad relativa del 75%. Es clave recordar que las fluctuaciones de la temperatura, ya sea en la granja, durante el transporte o en la incubadora, causará una mayor mortalidad embrionaria y pobre calidad del pollito. LA PERCEPCIÓN DE LA LUZ DE LAS AVES Explotación de gallos y gallinas reproductores pesadosPara terminar, una iluminación correcta es una parte esencial de la gestión de este tipo de explotación. Con un buen manejo del programa de luz se facilita la obtención de más huevos incubables y con ello más pollos por criador, lo cual contribuye a la sostenibilidad del negocio. Las fuentes de luz artificiales utilizadas en las instalaciones, como lámparas incandescentes, tubos fluorescentes y, más recientemente, lámparas de ahorro de energía y de bajo coste LED están llamados a ser de uso más generalizado. Incluso, la tecnología de luz de alta frecuencia, que generen tasas de luz que se aproximen al rango espectral natural (tecnología "luz verdadera") está ya en uso en algunas operaciones avícolas. Esto también permite adaptar la duración de los “días” para la puesta. Ha sido tradición dar a las reproductoras pesadas un programa de 8 a 11 o 12 horas de luz con 20 o 22 semanas, seguido de una serie de aumentos para llegar a un máximo de 15 a 16 horas a aproximadamente con 27 semanas de la edad. Sin embargo, se ha observado que esta cantidad de horas no les aporta ningún beneficio. Es más, lo que se consigue es una caída de la producción a partir de las 40 semanas de vida, aparte de un empeoramiento de la calidad de la cáscara. Actualmente se está trabajando con programas de luz de unas 13 o 14 horas como máximo, obteniéndose con ello una mayor persistencia de la puesta y mejora de los parámetros de incubabilidad. Esto sólo se puede conseguir en este tipo de naves cerradas, donde se trabaja con este tipo de programa de luz y donde las diferentes épocas del año no influyen en los parámetros productivos, ya que en nuestro país las horas de luz natural van desde las 16 o 17 horas de los meses de mayo a junio hasta las 12 o 13 horas de los meses de invierno.